Para muchas mujeres, la celulitis no es el único problema
que salta a la vista cada vez que toca enfundarse un pantalón ajustado. Además
de una curba prominente en el exterior de sus muslos, muchas asisten a otra
cruda realidad: el exceso de grasa en su parte interior. Algo que sin duda
podría eliminarse con cirugía, pero que en tiempos de crisis (o pánico a los
quirófanos), puede alejarse de nuestro alcance. Lucir un culotte como
toca -o simplemente hacer que no se marque en exceso el inicio de nuestros
muslos- exige fuerza de voluntad, perseverancia y algo de tiempo. Cuando
se da un exceso de grasa en esa zona tan específica, debemos saber que parte de
ella ya estará incrustada, por lo que el sacrificio necesario para su
eradicación será doble.
Eso sí, de carácter imperativo y sin
posibilidad de renuncia o abandono Paso número1. Si somos personas con sobrepeso o
nos acercamos a él, resulta casi imprescindible hacer un poco de dieta. No
se busca algo drástico, pero sí bajar unos pocos quilos. ¿La propuesta?
La
clásica: algo de dieta (baja ingesta de grasas y
azúcares y alta en fibras y verduras), los religiosos 1,5-2 litros de agua y
algo de ejercicio.
Paso número 2. Ejercicios. La mayoría de los cuales se
pueden realizar en casa, con lo que aquí pocas excusas bastan. Al principio se
sufrirá, pero poco a poco notaremos los resultados.
Ejercicio A. Estirados al suelo de lado, doblar la pierna
exterior y estirar la interior. Luego, levantar rápidamente ésta última hasta
cierta altura, y volverla a bajar sin tocar el suelo muy lentamente.
Lo ideal es realizar este ejercicio como mínimo una vez al día, durante unos
4-5 minutos. A medida que os sea más fácil, podéis aumentar el tiempo o la
intensidad, y hasta poder atar pesas a los pies para reforzar el trabajo.
Ejercicio B. Para éste, simplemente necesitaréis algun
objeto de peso. Algo que puedas arrastrar con las piernas, ejercitando así su
parte interior. Para unos resultados visibles, será necesario empujar el peso
de 40 a 100 metros, más de una vez al día y tres días a la semana. ¿Lo mejor?
Hacerlo sentados en una silla.
Ejercicio C. Si estamos inscritos en algún gimnasio, lo
mejor será aprovechar las cintas. Así, sólo necesitamos atar nuestro pie a la
cinta y ejercer la fuerza necesaria para devolver la pierna a nuestro cuerpo y
desengancharla. Lo mejor son 4-6 series de 8 a 20 repeticiones, más de dos
veces por semana.
Ah, e intenta caminar rápido siempre que puedas. Así,
siempre quemarás más respecto a cuanto se consigue caminando lentamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.