El Arbol De Navidad

Para los cristianos, simboliza en el día del nacimiento de Dios (día de Navidad), la recolección de los frutos del Árbol de la vida como un regalo después de un año de privaciones.

Una de las leyendas germánicas hablaba de un árbol cuyas ramas sostenían la bóbeda celeste donde las estrellas, sol y luna quedaban colgadas de él. Esto explica la costumbre de adornar con luces los árboles. También era símbolo de vida, ya que el abeto continúa estando verde aun en invierno. Quizás esta es la teoría más fehaciente del origen del Árbol de Navidad.

Otra leyenda de esas tierras, habla como San Bonifacio estaba intentando cristianizar a los Druidas en el siglo VIII; al derribar el roble que tanto adoraban los Druidas, todos los demás árboles colindantes cayeron, salvo un abeto; San Bonifacio interpretó esto como una señal divina de que el abeto simbolizaba la adoración al cristianismo.

Otra versión de San Bonifacio, habla de una vez que se encontró en el bosque con unos hombres que pretendían sacrificar un niño en nombre de Thor delante de un abeto. San Bonifacio derribó el abeto de un golpe y explicó a los hombres que como era el árbol de la vida, se negaba a ser testigo de ese sacrificio injusto.

Otra historia cuenta que Martin Lutero quedó fascinado al ver las estrellas entre los árboles en el bosque, y decidió emular esa visión en su propia casa. Esta costumbre se fue extendiendo luego por Alemania. Diferente versión habla sobre como Lutero decoraba los árboles con manzanas para explicar a los nó creyentes que era una simbología de los dones recibidos por Jesucristo con su nacimiento.

En el siglo XVI, en los paises Nórdicos, se preparaba el árbol como una sorpresa para los niños y luego se reunía la familia alrededor del mismo, dando por comenzada la Navidad. Los suecos introdujeron esta tradición en Alemania a partir de 1648; los primeros informes hablan de Alsacia (zona entre Alemania y Francia). La costumbre se fue extendiendo por Europa progresivamente durante el siglo XIX, por ejemplo, cuando la Reina Victoria de Inglaterra decidió decorar un árbol de Navidad con velitas. En España la costumbre se terminó de implantar durante el siglo XX.