El alcohol tiene efectos en
el cuerpo tanto a corto como a largo plazo. Los efectos del alcohol dependen de
la cantidad de bebida alcohólica consumida y puede ser ligero, moderado o
pesado. Beber en exceso puede ser un signo de alcoholismo, que es la adicción
al alcohol o la dependencia.
Los efectos del abuso del alcohol a largo plazo suelen ser duros, y si se busca
dejar el alcohol, no se necesita mucho tiempo para sentir los síntomas de
abstinencia, manifestados en fuertes sacudidas severas. La dependencia al
alcohol no sólo es el deseo psicológico para beber, sino que también es de
naturaleza física. Los efectos del consumo de alcohol durante un largo período
de tiempo incluyen problemas de la fatiga y el sueño. El consumo excesivo de
alcohol también puede causar daños en los órganos especialmente en las
funciones del hígado.
Los estudios sobre los efectos del alcohol consumido a largo plazo no son tan
claros. Por ejemplo, muchos estudios han demostrado que beber un vaso de vino
tinto al día beneficia el corazón, mientras que otros estudios muestran que las
mujeres que consumen una bebida alcohólica al día pueden tener un riesgo mayor
de cáncer de mama. Básicamente, los efectos del alcohol en el cuerpo son un
veneno al igual que en diferentes grados los cuales son difíciles de determinar
con exactitud. Por ejemplo, las personas que beben una gran cantidad de
alcohol, llegando inclusive a vómitar, se debe a los efectos de corto plazo de
una intoxicación por alcohol. El comportamiento incoherente y vómitos que
algunas personas encuentran como un efecto divertido al beber en exceso, son la
realidad en signos graves de intoxicación.
El alcohol reduce el azúcar en la sangre, por lo que los diabéticos deben tener
cuidado si consumen bebidas alcohólicas. Los efectos del alcohol sobre el
sistema nervioso central actúan como un depresivo. La alcoholemia es la medida
a corto plazo de los efectos del consumo de alcohol en el torrente sanguíneo.
Una prueba de alcoholemia es aquella que determina el contenido de alcohol en
la sangre del conductor y permite ver si este excede el límite legal.
La cantidad de alcohol que una persona puede beber sin experimentar ningún
efecto a corto plazo depende de factores tales como el peso corporal y la
cantidad de comida en el estómago. El consumo de alcohol con el estómago vacío
aumenta sus efectos. Tener un vaso de vino con la cena es muy diferente a
consumir altas cantidades de alcohol para embriagarse. Beber hasta la intoxicación,
es una base regular para escapar de los problemas, pero también son señales de
que los efectos del alcohol están llevando a el abuso o dependencia.
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